Hemos indicado en el anteriormente el concepto de malware. Se trata de cualquier código o aplicación maliciosa que tiene como objetivo infiltrarse o dañar un ordenador, o un dispositivo que esté conectado a Internet (smartphones, Tablet, weareables, dispositivos IoT,...), que intentan tomar control del ordenador o dispositivo móvil para robar datos y contactos. El caso más común es pedir que hagamos "clic" en un enlace desconocido o un fichero adjunto. Para evitar el Malware es recomendable no abrir correos ni mensajes de remitentes desconocidos con archivos adjuntos, y si el remitente es de confianza, usar un programa antivirus antes de abrir ficheros adjuntos del correo.
* Virus: Son aplicaciones capaces de crear copias de sí mismas, de forma que fusionan estas copias a otras aplicaciones legítimas o en zonas especiales de soportes de almacenamiento, como discos duros internos y externos. Necesitan de la intervención del usuario para propagarse, utilizando vías la ingeniería social, descarga de ficheros, visita a páginas web de dudosa reputación, utilización incorrecta de dispositivos externos de memoria, correo electrónico, etc. Los virus suelen diseñarse para producir todo tipo de problemas en un ordenador, como volverlo más lento, bloquearlo o impedir el acceso a la información.
*Gusanos: Son un tipo de código malicioso que se diseñó inicialmente para propagarse a través del correo electrónico. En la actualidad, son capaces de replicarse y propagarse a través de la red sin necesidad de la intervención del usuario, a través de servicios de mensajería instantánea o de redes de intercambio de ficheros (P2P). Es el motivo principal por el que no es recomendable utilizar páginas de descarga ilegales. Éstas utilizan el sistema P2P. Los gusanos suelen aprovechar las vulnerabilidades de los sistemas operativos o de las aplicaciones instaladas (principalmente desactualizadas), y su velocidad de propagación es muy alta en comparación con los virus.
*Troyanos: Son aplicaciones que se ocultan otras de carácter legítimo, como aplicaciones de ofimática, facturación, documentos de trabajo, fotos, etc. para proporcionar acceso no autorizado al sistema infectado. Su propagación requiere de la acción directa del usuario para su descarga e instalación.
Están especializados en el robo de credenciales bancarias y son una de las mayores amenazas en la actualidad, por la proliferación de este tipo de código malicioso, muy utilizado por los ciberdelincuentes.
* Spyware: Son aplicaciones destinadas a la recolección de información sobre la actividad de un usuario. Están diseñadas para pasar inadvertidas, de forma que el usuario no perciba ningún tipo de actividad fuera de lo normal. Cuanto más tiempo pasen sin ser detectados, más información serán capaces de recopilar, que luego es enviada a servidores o direcciones de correo que la recogen y la usan para fines.
* Adware: Son aplicaciones diseñadas para mostrar publicidad al usuario. Suelen ser instalados junto con otros programas legítimos.
Estos programas pueden recopilar información sobre la actividad del usuario con objeto de mostrar publicidad dirigida y específica.
* Ransomware: Tiene como objetivo bloquear y secuestrar el acceso a un equipo de trabajo o a la información que contiene, con el fin de pedir un rescate económico a cambio de su desbloqueo.
El malware es un programa malicioso que tiene como objetivo infiltrarse en una computadora para obtener datos o dañarla. Por lo general, un ordenador puede verse en peligro si el usuario frecuenta sitios webs infectados, instala programas, juegos, archivos de música de dudosa reputación. También se puede encontrar estos tipos de virus en los USB, incluso, en los correos electrónicos.
Por estos motivos, la prevención es una acción fundamental si deseamos que nuestro esquipo esté libre de malware. Si deseas conocer qué debes hacer para evitar la infección, te dejamos algunos consejos que debes tener en cuenta.
Un cifrado WPA o WPA2 determina una clave de acceso a la red WIFI más segura y extensa que un cifrado WEP, existente hace 3 años.